Los suizos han hablado y la energía nuclear ha sido votada a favor de las energías renovables.
En la boleta de ayer (21 de mayo) estaba la Estrategia de Energía 2050 del gobierno suizo, un referéndum que pedía la prohibición de nuevas centrales nucleares y la inversión en energía renovable. Según este plan de energía, las cinco centrales nucleares existentes en el país permanecerán operativas mientras se cumplan las normas de seguridad, explica The Local, una red de noticias en inglés en Europa. La producción de energía se centraría en la energía hidroeléctrica, según The Local, junto con otras fuentes de energía renovables como la solar y la eólica.
Aunque los votos no se han finalizado, el New York Times informó que las cifras iniciales muestran que los votantes suizos aprobaron el plan de energía con un apoyo del 58.2 por ciento. El sistema de democracia directa del país les da a los votantes el poder de aprobar importantes cuestiones de política.
"quiere una nueva política energética y no quiere nuevas plantas nucleares", dijo Doris Leuthard, el ministro de energía suizo, en una conferencia de prensa, según The Times. "La ley lleva a nuestro país a un futuro energético moderno".
Leuthard dijo que la Estrategia Energética 2050 reducirá el uso de combustibles fósiles y energía extranjera (Suiza fue un importador neto de energía en 2016) al tiempo que apoya y expande la producción nacional de energía renovable, informó el Times. Aunque algunos aspectos del plan entrarán en vigencia en 2018, se prevé un aumento cuádruple en la energía solar y eólica para 2035.
Según el Times, menos del 5 por ciento de la producción actual de energía de Suiza es solar y eólica, mientras que la energía hidroeléctrica representa el 60 por ciento de la producción de energía y la nuclear el 35 por ciento. La fusión nuclear en la central nuclear de Fukushima Daiichi en Japón, luego del gran terremoto y tsunami del 11 de marzo de 2011, es en parte responsable de la falta de apoyo para dicha energía en Suiza y el resto de Europa, según el Times.
En 1978, la legislación prohibió las centrales nucleares en territorio austríaco. Después del desastre de Fukushima, Alemania decidió acelerar su plan para eliminar la energía nuclear, informó el sitio de noticias Deutsche Welle.
Las encuestas sugieren que Europa no está sola en este hombro frío nuclear: una encuesta de Gallup realizada en 2016 encontró que la mayoría de los estadounidenses (54 por ciento) se opone al uso de la energía nuclear. En comparación, en 2011, solo unos días antes del desastre de Fukushima, el 57 por ciento de los estadounidenses dijeron que estaban a favor de la energía nuclear, informó Gallup.