Los cielos más claros de la tierra

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Los telescopios están encaramados en las cimas de las montañas porque el aire allí arriba es más delgado, seco y claro que la vista desde el nivel del mar. Con su gran altitud, bajas temperaturas y cielos cristalinos, Dome C cuenta con condiciones de visualización casi perfectas. Un equipo de astrónomos franceses espera construir un trío de telescopios que funcionen juntos como un único telescopio grande como prototipo. Pero tienen la vista puesta en una instalación más grande que podría rivalizar con las capacidades de los mejores telescopios de la Tierra. Se trata de ubicación, ubicación, ubicación.

La estación Concordia es una instalación de investigación ubicada en el Domo C, a una altitud de 3,300 metros (10,800 pies) sobre el nivel del mar. Durante las noches de invierno, las temperaturas pueden bajar a -63 Celsius (-82 Fahrenheit). Este frío amargo elimina la radiación de fondo térmico que reduce la sensibilidad de los telescopios en climas más cálidos. Además, el Domo C disfruta de cielos perfectamente despejados el 96% del tiempo.

Aunque la vista desde el Domo C nunca podría ser tan buena como la vista desde el espacio, como con el telescopio espacial Hubble, podría ser casi tan buena. Las imágenes tomadas de este lugar podrían ser tan buenas como el Hubble aproximadamente el 10% del tiempo, y las imágenes en el espectro infrarrojo cercano podrían ser tan buenas como el Hubble el 50% del tiempo.

Suena como un gran lugar para un telescopio.

Pero la atmósfera en el Domo C es perfecta para construir un interferómetro. Aquí es donde la luz de varios telescopios se une para actuar como un único telescopio más potente. Un interferómetro construido en el Domo C podría ser varias veces más sensible que un observatorio de tamaño similar en cualquier otro lugar de la Tierra.

Para probar sus teorías y demostrar la calidad de los cielos en el Domo C, los astrónomos franceses proponen construir un prototipo de interferómetro, llamado Mykerinos, que consistiría en tres telescopios ópticos de 40 cm (16 pulgadas). La luz combinada de los tres telescopios le daría suficiente poder de resolución para detectar planetas calientes como Júpiter en órbita alrededor de otras estrellas, o detectar binarios de alto contraste. Y si pudieran colocar sus telescopios en torres de 30 metros (100 pies) de altura, o utilizar ópticas adaptativas, podrían reducir aún más la distorsión atmosférica.

Pero la verdadera esperanza del equipo es construir un instrumento llamado KEOPS, que consistiría en 36 telescopios de 1.5 metros dispuestos en 3 anillos concéntricos de un kilómetro de diámetro. El primer anillo contendría 7 telescopios, el segundo tendría 13 y el tercero tendría 19. Este instrumento tendría la superficie combinada de los telescopios Keck, pero estaría ubicado en los cielos fríos y claros de la Antártida. Con este poder y cielos despejados, podría rivalizar con las capacidades de un telescopio de 30 metros.

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